Es un medio para ayudar al Ser que mora en ti que se exprese con naturalidad y sin trabas. ¿Cómo lo hace? Permitiendo a través de la estimulación de diferentes zonas reflejas, que las energías que están en tu interior se distribuyan y circulen por tu cuerpo con mayor libertad. A veces las trabas son muy importantes, y esto hace que aparezcan síntomas, indicios de que algo no está bien en vos y se manifieste en tu cuerpo, ya sea como molestias leves o ya a través de una enfermedad.
Es probable que una sola sesión no alcance, pero vale el intento una y otra vez hasta llegar a centrarte. Como las capas de una cebolla, se va trabajando y a la vez se van soltando, una a una. Así, te vas liberando de aquello que impide tu desarrollo armónico. Mientras circula la energía, tambien mejora la circulación en el sistema nervioso, renovando de esta manera la comunicación con todo el cuerpo en su totalidad...con cada órgano, cada músculo, cada glándula. Los síntomas que presentabas al comienzo del tratamiento lentamente se van corrigiendo y así te sentís más pleno, mejora tu ánimo, y, en definitiva, te encontrás con vos mismo.
